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Blancpain Villeret Quantième Perpétuel
26/06/2024
Opinión
Cuando hablamos de Blancpain siempre le hacemos mucho ruido al reloj de las cincuenta brazas, el Fifty Fathoms y de como esa pieza marcó un antes y un después en la historia de la relojería creando el primer reloj moderno de buceo.
Creado por buzos y para buzos esta revolucionaria pieza fue hecha como un reloj-herramienta tomando en consideración la manera en que sería usado debajo del agua.
En fin, lo volvimos a hacer, hablamos de Blancpain e inevitablemente regresamos al tema del Fifty Fathoms, ni siquiera es un círculo vicioso, es una figura de ocho lo que acabamos de hacer.
El tema de hoy es el Villeret Quantième Perpétuel, quizá a aquellos no muy familiarizados con la marca les sorprenda un poco que Blancpain hace más que relojes de buceo; bueno, este es uno de ellos.
Bueno, comencemos con lo básico, ¿qué significa Quantième Perpétuel? Es literalmente calendario perpetuo, pero en francés.
El Villeret del nombre no solo es la colección a la que pertenece, sino también es el nombre de una región en Suiza, característico por tener una población muy densa de árboles de abeto, parientes de nuestros familiares pinos.
Un calendario perpetuo es una complicación fascinante que le permite al reloj mostrar la fecha de una manera altamente precisa al grado de que no requiere ajuste alguno; por lo menos por el resto de nuestra vida, suponiendo que el reloj se mantenga en funcionamiento.
Por ejemplo, el Villeret Quantième Perpétuel es tan preciso y confiable que Blancpain tiene la certeza de que tendrá que ser corregido hasta el mes de Febrero… del año 2100; y si usted llega a vivir hasta ese momento, por favor acuérdese de este artículo.
Es maravilloso lo complejos que son los calendarios perpetuos en su funcionamiento y es una complicación que es muy fácil hacer mal, no en el sentido de que no funcione, sino en el sentido de que a veces se pone demasiada información en la carátula y nos ahoguemos en el mar de números, letras, manecillas y contadores.
Afortunadamente, Blancpain ha hecho un trabajo excepcional con el Villeret Quantième Perpétuel, es claro y hasta cierto punto minimalista en la manera de dar la información.
A las 6 tenemos una fase lunar, la cual es muy Julio Verne: la luna tiene un rostro como la clásica película “De la Tierra a la Luna”, este es un detalle que se aprecia mucho.
Luego a las 9, 12 y 3 está la indicación del calendario perpetuo, a las 9 tenemos el día de la semana, mientras que a las 12 está no solo el indicador del mes en el que se está, sino también el indicador de si el actual es año bisiesto o no.
Este último detalle está señalado con subdivisiones que van “1, 2, 3, L”, L se refiere a “Leap”, como en “Leap Year”, el término en inglés de año bisiesto.
Y finalmente a las 3 está la fecha.
Dentro de la caja de 40.3 mm de oro rojo tenemos el calibre automático Blancpain 5954 con 72 horas de reserva de marcha.